Califica el nuevo trasvase aprobado como “otro ataque más de Rajoy y Cospedal a los pueblos ribereños y a Guadalajara”
El candidato al Congreso del PSOE por Guadalajara, Pablo Bellido, ha afirmado hoy en Sacedón que el nuevo trasvase aprobado, de 38 hectómetros cúbicos para este mes de junio, supone “otro ataque más de Rajoy, Cospedal y el PP a los municipios ribereños y a la provincia de Guadalajara” y que “es necesario poner fin al saqueo permanente que sufren los pantanos de Entrepeñas y Buendía para que esta comarca tenga futuro”.
Bellido, que se ha reunido en Sacedón con alcaldes de municipios ribereños de la cabecera del Tajo, ha lamentado que “el PP juega con el agua de Entrepeñas y Buendía por intereses puramente partidistas, sin importarles lo más mínimo los intereses de Guadalajara ni que este verano puedan volver los problemas de abastecimiento en algunos municipios de la comarca, como ya ha ocurrido en años anteriores, mientras ven como cada mes se autorizan nuevos envíos de agua hacia Levante”.
El candidato socialista ha apostado por “la puesta en marcha, de una vez por todas, de las desaladoras construidas en el Levante con el dinero de todos los españoles, porque es la alternativa razonable para que esa zona de España disponga de agua y deje de saquearse a la cabecera del Tajo”.
Pablo Bellido ha agregado que “desde que Cospedal cocinó el memorándum del Tajo, una de sus grandes traiciones a la provincia de Guadalajara y a la región, el saqueo de Entrepeñas y Buendía ha sido incesante, con Rajoy aprobando trasvases todos los meses y, además, haciéndolo con una total falta de transparencia, ocultando e incluso retorciendo las cifras reales de agua embalsada e incumpliendo los paupérrimos límites a las derivaciones que contempla el propio memorándum”.
Es el caso del trasvase aprobado ayer, ha señalado, ya que se ha autorizado la derivación de 38 hectómetros cúbicos durante el mes de junio, 30 de ellos para riego, cuando la cantidad de agua embalsada a 1 de junio solo habría permitido la autorización de un trasvase de 20 hectómetros cúbicos como máximo en aplicación de “ese memorándum que Cospedal impuso junto a otros dirigentes del PP y que desde el PSOE siempre dijimos que era una traición a Guadalajara y una condena a los pueblos ribereños”.
