Detenidas 19 personas que introducían irregularmente inmigrantes en España cruzando el Estrecho de Gibraltar en motos de agua

Información
Portada 27 Abril 2018
social youtube xornalgalicia   feed-image

La organización contaba con una fuerte infraestructura en España y en Marruecos y también utilizaban otros métodos como el uso de pequeñas embarcaciones hinchables que simulaban faenar o practicar navegación de recreo, cobrando 4.000 euros por trayecto y 500 más si el inmigrante quería un primer alojamiento en nuestro país

 

Las embarcaciones partían de Tánger (Marruecos) y se acercaban hasta el límite de las aguas territoriales españolas donde abandonaban a los inmigrantes, con la única indicación de que se dirigieran hacia las costas españolas siguiendo las referencias visuales que destacan por la noche

Para apoyar la investigación, EUROPOL desplazó hasta Almería una oficina móvil
       

Detenidas 19 personas que introducían irregularmente inmigrantes en España cruzando el Estrecho de Gibraltar en motos de agua

 

Agentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, en una operación conjunta que ha contado con el apoyo de EUROPOL, han desarticulado una organización criminal de origen marroquí dedicada a la introducción irregular de inmigrantes en España y al tráfico de sustancias estupefacientes. En la operación han sido detenidas 19 personas por los supuestos delitos de pertenencia organización criminal, contra el derecho de los ciudadanos extranjeros y contra la salud pública y se han realizado 7 registros en diversas localidades de Almería. Principalmente, los arrestados utilizaban motos de agua para cruzar el Estrecho de Gibraltar aunque también usaban pequeñas embarcaciones hinchables que simulaban faenar o practicar navegación de recreo. Cobraban 4.000 euros por trayecto y 500 más si el inmigrante quería un primer alojamiento en nuestro país.

En los siete registros practicados en la provincia de Almería se han intervenido 11,6 kilogramos de distintos tipos de estupefacientes, 15.460 euros en efectivo, equipos informáticos, teléfonos, tablets y soportes físicos de memoria externa, dos vehículos y diversa documentación relacionada con las actividades investigadas.

Medios empleados para el tráfico ilegal de las personas

La organización empleaba distintos medios para el tráfico ilegal de las personas (mayoritariamente de origen magrebí), siendo uno de ellos el uso de potentes motos de agua con las que cruzan el Estrecho de Gibraltar en pocos minutos. Asimismo, también hacían uso de pequeñas embarcaciones tipo “patera” o hinchables, fletadas desde pesqueros o embarcaciones semirrígidas que, saliendo de las costas cercanas a Tánger (Marruecos), simulaban faenar o practicar navegación de recreo. Estas embarcaciones se acercaban hasta el límite de las aguas territoriales españolas y abandonaban allí a los inmigrantes a su suerte, con la única indicación de que navegaran hacia las costas españolas.

Una vez que los inmigrantes llegaban a España, en función de la tarifa que habían pagado, contactan con determinados números de teléfono móvil que previamente habían sido facilitados por la organización. Así eran recogidos y trasladados a otros puntos de la geografía nacional por otros miembros de la red (generalmente en la provincia de Almería).

En otras ocasiones la organización contactaba con otros integrantes de la red para conseguir documentación de otras personas, con características físicas similares a las de un migrante concreto, para que le permitieran el paso del control fronterizo.

Introducción de droga en España

La organización también se dedicaba a introducir droga en España a través de vehículos preparados con doble fondo que cruzaban la frontera por el puerto de Tánger. En otras ocasiones era introducida a través de embarcaciones en las que trasladaban el estupefaciente señalado con una marca específica propia de cada cliente. Esa señal les facilitaba posteriormente el reparto de los “paquetes” a los distintos clientes.

Una vez en España, la droga era recogida y trasladada hasta la zona de Almería donde la organización contaba con una estructura de colaboradores sustentada en un núcleo familiar, que se encarga de la guarda, distribución y venta del estupefaciente