El atún enlatado, un básico en despensas y loncheras escolares, es promocionado como una fuente rápida de proteínas y omega-3. Sin embargo, su consumo habitual, especialmente en niños, esconde riesgos graves para la salud: altos niveles de mercurio, exceso de sodio y la presencia de soya procesada, componentes que amenazan el desarrollo infantil y reflejan fallas en la regulación alimentaria.
Mercurio: Un Neurotóxico en la Mesa Infantil
El mercurio, metal pesado acumulado en especies marinas grandes como el atún, es el principal culpable. Estudios de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria (AESAN) revelan que el atún enlatado contiene hasta 0,26 mg de metilmercurio por kilogramo, la forma más tóxica de este metal. Aunque las latas suelen usar especies más pequeñas (como el atún claro o listado), una investigación de ONGs europeas alertó que el 10% de las latas analizadas superan los límites legales de mercurio.
El atún enlatado: el veneno silencioso que consume a los pobres. Por Miguel Delgado Pte Pladesemapesga
Para los niños, cuyos sistemas nerviosos están en desarrollo, la exposición al mercurio es catastrófica. Carlos Rodrigo, pediatra del Hospital Germans Trias, advierte que afecta la capacidad de aprendizaje, el coeficiente intelectual y los sentidos. Las autoridades recomiendan que menores de 10 años, embarazadas y lactantes eviten su consumo, limitándolo a 170 gramos semanales en estos grupos. No obstante, la falta de etiquetado claro y la promoción del atún como "saludable" perpetúan el riesgo.
Sodio: Un Enemigo Silencioso
Una sola lata de atún puede contener hasta 300 mg de sodio, contribuyendo al consumo diario excesivo en niños. La Organización Mundial de la Salud (OMS) alerta que el abuso de sodio en la infancia se vincula a hipertensión temprana y enfermedades cardiovasculares en la adultez. Comparado con otros alimentos procesados como el queso, el atún enlatado refuerza una dieta alta en sal, normalizando paladares que predisponen a hábitos poco saludables.
Soya: El Aditivo Olvidado
Menos visible pero igualmente preocupante es el uso de aceite de soya en muchas latas. La soya, frecuentemente modificada genéticamente (GMO), contiene fitoestrógenos, compuestos que imitan hormonas humanas y podrían alterar el equilibrio endocrino en niños. Además, es un alérgeno común, con casos en aumento en la población infantil. Nicolás Olea, catedrático de Medicina de Granada, critica la falta de regulación frente a disruptores endocrinos: “Las recomendaciones llegan 20 años tarde”.
Video Propiedad de; E241: Atún Tuny una empresa de alto riesgo. Origen 360 El Informativo
Fallas Regulatorias y Alternativas Urgentes
Aunque la Comisión Europea establece un límite semanal seguro de mercurio (1,3 µg por kilo de peso), la realidad muestra que las latas contaminadas llegan a supermercados sin control riguroso. Mientras, la industria alimentaria prioriza la conveniencia sobre la seguridad.
Alternativas más seguras:
- Pescados bajos en mercurio: Sardinas, salmón salvaje o lenguado.
- Latas en agua o aceite de oliva: Evitan la soya procesada.
- Educación alimentaria: Priorizar productos frescos y diversificar proteínas.
Llamado a la Acción
El atún enlatado no es inocuo. Su consumo excesivo en niños es una bomba de tiempo por su carga tóxica, agravada por regulaciones laxas y desinformación. Urgen políticas estrictas de monitoreo, etiquetados claros y campañas que prioricen la salud infantil sobre intereses comerciales. Como consumidores, optar por alternativas seguras y exigir transparencia es el primer paso para proteger a las generaciones futuras.
Denuncias y pruebas
Una búsqueda dentro de la plataforma Facebook, con las palabras “atun clap” arroja alrededor de 40 publicaciones con denuncias asociadas a la lata de atún y los productos del programa CLAP venezolano, la mayoría de estos post replicaron el video analizado en esta verificación.
Oswaldo Zerpa, alcalde del municipio Unda del estado Portuguesa, se sumó a las denuncias y también realizó la prueba del lavado del atún para demostrar “que es cartón”, según una nota de El Pitazo y Reporte Confidencial. A propósito de esto, un medio de comunicación de esa región realizó la aclaratoria.
Una nota periodística firmada por Edgar Alexander Morales y que fue publicada por dos sitios (1 y 2) indica que “cuando se lava el atún, pierde el aderezo, el sabor y la consistencia, producto del agua, pero no hay un estudio en el que definidamente se compruebe que es cartón” y cita una investigación publicada por la revista Semana de Colombia donde también surgieron informaciones sobre la calidad del producto enlatado, aunque no se precisa si se trata de la misma marca “Atún A”.
Engaño con atún llega a Venezuela; venta de despensas CLAP Ir a la fuente de la noticia y captura de Profeco.. https://archive.is/qqPbk
Los intermediarios compraron en México las latas más baratas y ello les acarreó ganancias adicionales Fuente..+ Ir a la fuente de la noticia y captura de Profeco.. https://archive.is/qqPbk
Fuentes: AESAN, ABC.es, estudios publicados en revistas científicas (2020), investigaciones de ONGs europeas y declaraciones de expertos citados.
- https://bloomassociation.org/
- https://www.bloomassociation.org/en/
- https://www.foodwatch.org/en/
- https://elpais.com/sociedad/
- https://www.verificat.cat/es/
-
El atún de los CLAP es vegetal
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