Tras recalar en la ciudad noruega de Trondheim, la fragata Álvaro de Bazán y el buque de aprovisionamiento de combate ‘Cantabria’ actualmente integradas en la Agrupación Nº1 de la OTAN (SNMG-1) se hicieron a la mar para participar en el ejercicio “Cold Response” 16 que ha tenido lugar desde el día 29 de febrero hasta el 8 de marzo.

En este ejercicio, han participado unidades navales, aéreas y terrestres de los principales países de la OTAN, Suecia y Finlandia. En un ambiente muy exigente, con condiciones meteorológicas adversas, la fuerza naval participante se ha adiestrado para actuar en un escenario de alta intensidad con triple amenaza: submarina, de superficie y aérea.

La fragata ‘Álvaro de Bazán’, con su avanzado sistema de combate, actuó como comandante de la guerra antiaérea, mientras que el buque de aprovisionamiento para el combare ‘Cantabria’ fue la referencia logística de la fuerza.

Desarrollo del Ejercicio “Cold Response 16”

Durante el ejercicio, el ‘Cantabria’ realizó más de una decena de aprovisionamientos en la mar, con unidades de 6 países diferentes, (Francia, Dinamarca, Reino Unido, Holanda, EE.UU y España), a las que suministró más de 1.500.000 de litros de combustible. Además, prestó apoyo sanitario, transfiriendo medicamentos, a la fragata británica “Iron Duke” e hizo llegar, por medio de su helicóptero orgánico, repuestos esenciales a la fragata danesa ‘Niels Juel’ para reparar su radar de exploración aérea.

Uno de los hitos que ha marcado esta semana ha sido el cruce del Círculo Polar Ártico por parte de las unidades de la SNMG-1, con el tradicional pintado del alavante de los barcos de color azul (“Blue Nose”). Además, las elevadas latitudes por donde ha transcurrido el ejercicio han permitido contemplar espectaculares auroras boreales, lo cual supuso una motivación adicional para las dotaciones.

A la finalización de este ejercicio, las unidades de la SNMG-1 iniciaron tránsito en demanda del puerto de Oslo.